Cómo gestionar una adicción a las apuestas deportivas en la familia
En los últimos años, la adicción a las apuestas deportivas se ha convertido en una de las formas más comunes de ludopatía, especialmente entre jóvenes y adultos varones. La facilidad de acceso a plataformas online, el marketing agresivo de casas de apuestas y la falsa ilusión de «controlar el resultado» hacen que este tipo de conducta adictiva se desarrolle con rapidez y pase desapercibida durante un tiempo. Pero ¿qué puede hacer una familia cuando descubre que uno de sus miembros es adicto a las apuestas deportivas?
Pautas para ayudar a adictos a las apuestas deportivas
1. Reconocer la ludopatía sin estigmas
El primer paso es entender que la ludopatía por apuestas deportivas es un trastorno psicológico con consecuencias graves. No se trata de una falta de voluntad o de una simple afición descontrolada: es una adicción. Es importante evitar la culpabilización y adoptar una actitud empática que favorezca el diálogo. Las personas adictas tienden a ocultar el problema, por lo que el apoyo familiar es fundamental.
2. Evitar rescates financieros
Uno de los errores más frecuentes es «rescatar» económicamente al familiar adicto a las apuestas deportivas, asumiendo sus deudas con la esperanza de que eso ponga fin a la conducta. Sin embargo, esta acción suele reforzar el ciclo adictivo. En lugar de pagar las consecuencias, el adicto vuelve a jugar con la creencia de que la familia siempre lo salvará.
3. Buscar ayuda profesional especializada
Gestionar una adicción a las apuestas deportivas no puede recaer únicamente sobre la familia. Es fundamental acudir a un centro especializado en adicciones comportamentales, como Guadalsalus, donde se ofrece un abordaje clínico e integral. Aquí se trabaja con cada paciente, así como su entorno, dotando a las familias de herramientas para afrontar las crisis y acompañar el proceso terapéutico.
4. Establecer límites y normas claras
Es imprescindible que la familia recupere su autoridad emocional. Establecer límites claros —como no proporcionar dinero, controlar el acceso a dispositivos o supervisar los movimientos bancarios— no es una medida punitiva, sino protectora. La estructura externa va a ayudar a suplir la pérdida de control interna que caracteriza a los adictos.
5. Participar en terapia familiar
La adicción afecta a toda la familia, no solo al jugador. La participación en sesiones de terapia familiar ayuda a comprender el problema desde un enfoque sistémico, mejora la comunicación y reconstruye los vínculos rotos por la mentira, la desconfianza y el dolor. ¿Sabes cuáles son las mentiras más habituales de un ludópata?
En Guadalsalus sabemos que salir de la ludopatía por apuestas deportivas es posible, pero requiere compromiso, acompañamiento y un tratamiento personalizado para la ludopatía. Si un ser querido está atravesando esta situación, no esperes a que toque fondo. Pide ayuda profesional y empieza el camino hacia la recuperación en un centro de referencia como Guadalsalus.
Contamos con centros de ingreso para el tratamiento de adicciones diferenciados para hombres y mujeres, con una metodología innovadora, que profundiza en las diferencias bio-psico-sociales de cada género, aborda las causas que originaron la adicción con gestión emocional y trata de forma conjunta la adicción si hay presencia de trastornos mentales (patología dual) con psiquiatras en el equipo. En Guadalsalus sabemos cómo ayudarte.