Bebedor social: riesgos asociados al alcohol y rasgos de su perfil

Bebedor social

El consumo de alcohol está muy normalizado en España. De hecho, es muy habitual que tengas en tu entorno algún bebedor social o bebedora social. En este post profundizaremos en los riesgos del consumo de alcohol, las características del bebedor social y diferenciaremos entre hábitos tóxicos y alcoholismo.

Beber unas cervezas o una copa de vino tiene riesgos para la salud, incluso en cantidades bajas y de forma esporádica. No hay consumo de alcohol seguro, aunque pueda verse como algo normal a nivel social.

Riesgos asociados al consumo de alcohol

 Como tóxico, lo mejor es evitar su consumo por completo. Además de exponernos a desarrollar una adicción al alcohol, la desinhibición fruto de una embriaguez moderada o grave presenta, entre ellos, riesgos como:

  • Conductas sexuales irresponsables.
  • Conducción temeraria.
  • Agravamiento de problemas de salud.
  • Agresividad y tendencia a conductas violentas..
  • Alteraciones psíquicas y mentales.
  • Aumento de riesgo depresivo, incluso con posibilidades de autolesión.
  • Incremento de la ansiedad.
  • Impulsividad.


Todos ellos son riesgos a los que se enfrentan por igual el consumidor de alcohol ocasional, un bebedor social y una persona con adicción al alcohol. Por eso, es clave dejar de ver el consumo de alcohol como un hábito inocuo y actuar desde el primer momento que tenemos constancia de esta realidad.

Características del bebedor o bebedora social

  • Bebe siempre en compañía. No entiende los encuentros sociales sin alcohol y aprovecha para beber en eventos, salida de fin de semana, después del trabajo…
  • Se siente mejor cuando bebe en un evento social. El alcohol le ayuda a desinhibirse en situaciones sociales (a costa de asumir los riesgos que conlleva esta desinhibición) para estar en sintonía con la mayoría.
  • Puede pasar toda la semana sin beber. Su consumo va asociado a fines de semana y ocasiones especiales.
  • Prioriza planes donde hay alcohol. Incluso puede cortar relaciones con amistades que no compartan su estilo de vida.
  • No presenta abstinencia si no bebe. No sufre los síntomas físicos y psicológicos asociados al síndrome de abstinencia, pero sí los síntomas ligados al consumo de alcohol.

Pese a que todo esto te puede ayudar a identificar a alguien de tu entorno como bebedor o bebedora social, hay algunos patrones de comportamiento que también se dan en las personas alcohólicas.

Es importante no restarle importancia a estos detalles y abandonar la idea tan extendida de que beber para divertirse es algo normal.

Diferencias entre hábitos tóxicos y alcoholismo


  1. Frecuencia de consumo. La persona alcohólica bebe a diario, necesita hacerlo porque ha desarrollado dependencia. En cambio, al principio de su adicción la situación pudo empezar con un consumo esporádico que fue convirtiéndose en un hábito tóxico, como el del bebedor social.
  2. Pauta de consumo. Un bebedor social siempre necesita compañía para tomar alcohol. Alguien que practica este consumo tóxico de vez en cuando es más normal que lo haga en compañía.
  3. Síntomas físicos y psicológicos. La intoxicación con alcohol presenta riesgos para todas las personas, como veíamos antes. Una persona adicta también experimentará, además, los síntomas asociados al síndrome de abstinencia al alcohol cuando no consume.



Todo consumo de alcohol tiene riesgos. Por desgracia, hay casos de bebedores sociales que terminan en una adicción al alcohol y necesitan un tratamiento para desintoxicación de alcoholismo. Si alguien de tu entorno o familia se encuentra en esta situación, pide ayuda. Llama a nuestro teléfono 954 353 954 e infórmate. Nuestra primera cita es gratuita.

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